Los acertijos mentales tienen algo que nos impulsa a resolverlos. Quizá sea el gancho que siempre llevan asociado, la coletilla “a ver si puedes resolverlo a la primera” o “nueve de cada diez personas no lo consiguen“.
Los desafíos mentales, con sus infinitas variantes en forma de efectos ópticos, trucos mentales o pasatiempos para el cerebro, tienen una premisa similar: son fáciles de entender, para que todo el mundo pueda intentarlos, pero difíciles de resolver.
Acertijo
En un cuarto hay 4 gatos y cada gato ve 3 gatos